"Chicote" Calderón es un hombre que tiene mucho por celebrar, además del tricampeonato con América. Revivió su carrera profesional tras salir de Chivas y hasta su nivel le da para ser considerado para Selección Mexicana. Fue un protagonista de los festejos de las Águilas por acordarse del "Rebaño" y propinarles un insulto por el cual le podría llegar una multa.



La Liga MX podría multar a "Chicote" si considera que faltó al respeto, aunque el castigo sería económico y poco tendría que ver con su participación dentro del campo. Se desconoce la cantidad de dinero que Calderón o el América tendrían que pagar por la mentada de madre que le hizo a las Chivas durante los festejos en el Coloso de Santa Úrsula. Eso sí, el cariño de la afición sí se lo lleva en el corazón, porque cuando lanzó el insulto, todos los asistentes estuvieron de acuerdo y hasta vitorearon esta acción del lateral del América. Muchos aficionados a las Chivas se enfurecieron tras esta acción, pero se les olvida que en 2018, Rodolfo Pizarro hizo algo similar tras ganar la Concachampions, así que, el que hierro mata… El Clásico Nacional, enfrentamiento entre Club América y Chivas de Guadalajara, es mucho más que un simple partido de fútbol. Es una rivalidad histórica que ha marcado la vida de millones de mexicanos y que trasciende fronteras. Esta pasión, arraigada en la cultura popular, ha forjado una de las rivalidades deportivas más intensas del mundo. La rivalidad entre América y Chivas tiene sus raíces en la década de los 50. El contraste entre ambos equipos, uno representando la capital y el otro el interior del país, generó una polarización que se vio reflejada en las gradas. A esto se sumó la figura de Fernando Marcos, quien como jugador, entrenador y comentarista avivó la llama de la rivalidad.



América, con su poder económico y su afición cosmopolita, se enfrentaba a Chivas, un equipo que se identificaba con las raíces mexicanas y que promovía el futbol amateur. Fernando Marcos, porque este personaje fue fundamental en la creación de la rivalidad, ya que sus declaraciones y acciones polarizaron a la afición. El Clásico Nacional es mucho más que un partido de fútbol. Es una expresión de identidad, de pertenencia y de pasión. Los aficionados de ambos equipos viven este encuentro con una intensidad única, convirtiendo cada partido en una auténtica batalla. La afición de ambos equipos es una de las más grandes y apasionadas del fútbol mexicano. Los estadios se llenan en cada enfrentamiento, creando un ambiente eléctrico y festivo. Más allá de los resultados deportivos, el Clásico representa una lucha de identidades, de regiones y de estilos de vida. El Clásico Nacional ha trascendido el ámbito deportivo y se ha convertido en un fenómeno social y cultural. La rivalidad entre América y Chivas ha influido en la forma en que los mexicanos viven el fútbol y ha generado una gran cantidad de contenido en los medios de comunicación. El Clásico Nacional es uno de los eventos deportivos más cubiertos por los medios mexicanos, generando una gran expectación y debate. antidad de ingresos por taquilla, patrocinios y derechos de televisión. El Clásico Nacional seguirá siendo uno de los partidos más importantes del fútbol mexicano. La pasión de los aficionados y la rivalidad histórica entre ambos equipos garantizan que esta tradición se mantenga viva por muchos años más. Las nuevas generaciones de aficionados continúan alimentando esta rivalidad, asegurando que el Clásico Nacional siga siendo uno de los eventos más esperados del año. Esta rivalidad entre América y Chivas seguirá evolucionando con el tiempo, adaptándose a los cambios del fútbol y de la sociedad.



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